DESAZON

Cansada estoy y estoy triste,
con la mente apagada
con el alma en un grito,
con la sorda desesperación
de haber perdido una, otra
y otra vez, sin poder mas!

Con la encendida angustia 
de pensar a veces,
de sentir otras,
que no me queda mas
que esta oportunidad.
De aferrarme a ella
como hiedra necia,
que busco con ansias
que aprieto en mis sueños
que hiero también.

Con este infinito afán
de no perderla jamas,
con la mustia esperanza
de un después...
Con el augurio
de un mañana lejano
y tan cerca a la vez.

Con la suplica a Dios
de un tiempo con rumbo,
sin penas, sin ansias,
sin dolor, ni insomnios,
de paz en mi vida
para honrar al amor!

Mariella Bobadilla Pichardo